Cortó la Amex
Le cayó la fecha de corte de Amex a Aeromar, que ayer anunció su quiebra definitiva por deber más de $4,000 millones de pesos. La neta era ya un milagro que esos aviones siguieran volando, pero veamos qué pasa ahora con todos los trabajadores.
El intern ahora es más AMLOVER que el Attolini, pues ayer Andie dijo que vetará una propuesta de Morena para subirle el costo a las multas por faltarle el respeto al presidente. De todos modos ya lo tenemos amenazado de que le baje a su desmadrito, no nos vaya a caer un madrazo de Segob.
Medio mundo está infartado con el Chernobyl de Ohio. Todo porque se dio en la madre un tren cargado con químicos peligrosísimos. La gente está preocupada de que el agua y el aire puedan estar contaminados, pero el chief del Departamento de Salud contó con los dedos de la mano siete razones para tranquilizarse (como cuando el Covid duraba 2 semanas).
Andie está picadísimo con los últimos capítulos del Sinaloa Shore y ayer se le fue encima a Cesar Castro, el abogado de Don Genaro. Estaba tan encabronado con el personaje que hasta lo calificó como menos recto y honorable que Zambada mismo.
Mi Santi casi se lanza a la Cibeles a festejar como si hubieran levantado la décimo quinta orejona, pues ayer se filtró que el Barça le pagaba millones de euros a los árbitros. Los culés insisten que nada más eran para recibir informes técnicos.
Y hablando de futbol… Ya que andan desmontando el Kidzania en forma de país que se inventaron para el Mundial, Qatar mandó chingos de contenedores con los que estaba hecho el Estadio 974 a Turquía para que los usen de refugio tras el quake. Bien ahí sultanes.
Después de años con finanzas más culeras que las de El Taims ™, Aeromar anunció ayer el fin de sus operaciones porque de plano no pudo saldar sus deudas. Los Metrobuses aéreos llevaban milagrosamente 35 años volando, pese a que sus aviones están más culeros que la Cessna 1963 que se acaba de comprar Nico y con la que no para de mamar. Pero los 4,000 millones de pesos que deben entre impuestos, salarios y a proveedores, les dio la estocada final. El pedo ahora lo tienen sus más de 600 trabajadores —incluyendo 80 pilotos—, que ya están viendo su futuro nivel los weyes de Mexicana que venden sandwiches en la T1. (El País)
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